He derramado
tristeza
en el resplandor del ocaso
Huellas de incertidumbre
aglomeradas
en una larga sombra de despedida
Eclipse de metal y piedra
Sueños de naufragio
Emboscada de soliloquios y
resonancias
Temblor
malestar viscoso
en mi pecho
Vulnerado
por estacas de silencio
Dedicado a la fuerza que mantiene mi alma brillante,
mi corazón en movimiento, mi voluntad erguida y mis manos cálidas.
Al amor que, al despertar, transforma estacas
en sonrisa, bosque, belleza y vida.
Ernesto Arguello Silva
18-Ago-1993 1:41